A Dios: Porque me diste tres grandes oportunidades:
Haber nacido, haberte conocido y haberte servido como pastor.
A la Iglesia 1ª del Nazareno en Cd. Madero, Tam. Porque ha sido el instrumento de sustento económico y espiritual, para escribir este pequeño libro y otros más.
A mis Padres: Papá, tu pastorado sigue siendo ejemplo en el pastorado que actualmente ejerzo. A mi Mamá, de quien testifico, fue la palanca que el Señor uso, para iniciar el pastorado.
A mi Esposa e Hijos: Porque no supe aprovechar su niñez y aún lo siguen sobrellevando.
A mi esposa por su paciencia y dedicación a la obra del Señor.
A mis nietas, por ser lo más lindo que Dios me dio.
A Aliz y a Liza: Por ser mis dos grandes amores, que vinieron cuando más lás necesitaba, como un regalo de mi maravilloso Dios.
A Carlos B. Gonzzatti: Porque quiero encontrarte en vida para poder decirte: “Carlos, valió la pena tu proyecto educativo de 1984, éste y otros más, son también parte de ése, tu esfuerzo.
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