INTRODUCCIÓN AL POEMA
Algunas personas viven enamoradas de su Soledad,
gustan de la tranquilidad de estar a solas,
pues es así como llegan a sentirse plenos y dichosos.
Aman la soledad y no le temen.
Aunque son pocas las personas que piensan de esta manera,
podemos recordar aquel sabio consejo de la gran modista Coco Channel que dice:
“Es mejor vivir solo con gracia y alegría, que envejecer acompañado sintiéndote solo”.
PRECIOSA COMPAÑERA
Soledad, mí preciada compañera.
Cuando en el otoñal ocaso estás conmigo sentirme solo es mi delirio.
Respirarte para mí es fuerza, tenerte y amarte me trae fortaleza.
A más de esto me das tranquilidad, serenidad y una rara alegría.
No la alegría ni las risas pasajeras de la juventud
sino una alegría y una serenidad repletas de una especial plenitud.
Siempre había deseado escribir sobre ti, bella amiga Soledad.
No había podido inspirarme porque para ello te necesito a ti.
Ahora que estás conmigo puedo decirte que te amo y te admiro.
Me deleito al estar contigo, mi mejor amiga Soledad.
Necesito tanto estar contigo, hundirme en ti, vivir en ti
y perderme entre tus brazos, compañera Soledad.
En esta tarde otoñal me siento tan inspirado solo por ti y para ti
a mis ojos tan encarecida.
Que quisiera no te fueras nunca, hermosa amiga Soledad.
Autor: Edgar Medina
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